PRECISIONES SOBRE EL DESCONTROL DE LA DEUDA PUBLICA

PRECISIONES SOBRE EL DESCONTROL DE  LA DEUDA PUBLICA.

La prensa se escandaliza porque la deuda pública ha llegado al 100% del PIB, o sea,  alrededor del billón (millón de millones) de €. No ha llegado de repente, ha ido creciendo y lo grave es que no parará si no se cambia de modelo y de gestores.. Pero es que ese dato es parcialmente indicativo, pues a ello hay que añadir la deuda privada española, con lo que la deuda total española es el 387 %  de PIB, unos cuatro billones de €. De esta manera nos hemos convertido en el más endeudado del planeta. Al hilo de esta realidad, el profesor de Economía de la UPV, Joaquín Arriola, en declaraciones a la prensa afirma: “España tendrá que negociar una quita con los acreedores porque su deuda es impagable”.. Manifestaciones como estas son típicas de profesores  de la universidad que se han atiborrado de teorías y estudios de laboratorio que nada tienen que ver con la práctica, puesto que lanzan sus teorías, por muy novedosas que sean, pero sin haberlas puesto en activo y así conocer sus consecuencias. Porque  en economía se afirma que cuando no se puede pagar una deuda, se renegocia con una quita importante y así, solucionado. Cómo cree el profesor que van a reaccionar los acreedores? Se limitarán a llevar los resultados negativos a créditos fallidos? Qué más quisieran nuestros sesudos gestores de Economía que les perdonen las deudas sus acreedores. Pero, a qué cree que se deben todo el problema de Grecia, Irlanda y otros países que no pueden pagar sus deudas? Pues a que los bancos alemanes, franceses  e ingleses, los fondos de pensiones mundiales y los grandes especuladores son sus acreedores y si  declaran formalmente las falencias  les arrastrarían  a la quiebra. Una cosa es estar en situación de insolvencia más o menos velada, aunque cierta, pero otra muy distinta es presentar la declaración ante los jueces. Las consecuencias que se derivarían podrían llevar a la quiebra del sistema y quizá en este área los teóricos tendrían mucho campo para sus reflexiones. Parecería que es simplemente cosa de semántica, pero el profesor debería saber que la economía tiene una base virtual que es la confianza y que  la carencia de ella es en estos momentos la causa principal de la crisis y que no se remontará hasta que  aquélla se recobre. Los teóricos expresan sus criterios libremente y ayudan a progresar, pero el problema surge cuando algún político insensato  propone al teórico que implante sus tesis, como es el caso del catedrático Montoro o el Economista del Estado, Soria, quien se ha metido en un jardín con las tarifas eléctricas y ya veremos cómo soluciona el invento. Así salen de preparados nuestros economistas de la universidad.