EL PUENTE EUSKALDUNA
Desde la importante transformación del entorno de la Ria se ha convertido en la estampa de un Bilbao
moderno y amable, pero con sus señas de identidad que le han dado carácter
desde siempre. Uno de esos iconos es el Puente Euskalduna que tiene un diseño
tan original y que se está convirtiendo en el espacio simbólico, pues comunica
el Bilbao clásico, aunque renovado, con la nueva área que será la península de
Zorrotzuarre. Pero el Puente tan modernista debería ser además seguro y útil y
no caer en la ficción de que lo bello o lo estético tiene que primar sobre la
seguridad, como ha sido el caso de las planchas de cristal del suelo del Zubi
Zuri o los chaparrones y fríos del Aeropuerto de Loiu, sólo porque el diseñador
tiene un jerarquía de valores exotérica. La utilidad de Puente en un lugar tan
transitado está demostrada, pero adolece de la seguridad suficiente. En el
carril de paso desde la Rotonda de Deusto hacia el Sagrado Corazón existe una
barandilla protectora de 70 cm. de altura poco sólida, de manera que si se produjera un
accidente en esa dirección o un choque con vehículos en dirección contraria, la citada
valla no sería capaz de soportar el
impacto y el peso del vehículo, con lo que se precipitaría en las aguas de la
ría. De hecho hay señales de que alguno ya ha impactado contra dicha valla, lo
cual hace suponer que los accidentes son
posibles y en algún caso con consecuencias irremediables. La solución debería
pasar por instalar una segunda valla más sólida y con mayor altura, de manera
que incluso pudiera soportar el impacto de buses de mayor altura, por tanto,
con el centro de gravedad más elevado y con mayor riesgo de precipitarse a la
ría en caso de accidente. La valla a instalar sería cuestión de los técnicos de
seguridad, pero como sugerencia, podría ser equivalente a las instaladas en el
puente de Ibarrekolanda que va de Enékuri hasta la rotonda en la que se inicia
el de Euskalduna. Cuando se produce alguna tragedia desearíamos que se pudiera
dar marcha atrás a la moviola y así evitar las causas cuando ya no es posible:
los hechos son irreversibles. Sin embargo en esta ocasión sí existe la posibilidad
de la moviola: ahora todavía sin ninguna
tragedia que lamentar es el momento de pensar en el riesgo y de evitar las consecuencias
antes de que se produzcan. Que este entorno tan visitado por paseantes felices
responda a lo que reflexionaba Nietzsche: “Todos los grandes pensamientos son
concebidos al caminar”
1 comentario:
¡Que hermoso es eso de "Todos los grandes pensamientos son concebidos al caminar"!
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