miércoles, 9 de septiembre de 2015
LA WEB DE ErNE
LA WEB DE ErNE
Merece la pena entrar en la Web de este sindicato de la Ertzantza para conocer aspiraciones y objetivos de sus afiliados. Sorprenden sus reivindicaciones, los motivos de sus criticas y que no mencionen lo que les conviene ocultar.. Están pidiendo la ampliación de la plantilla, pues la juzgan insuficiente para desarrollar su “trabajo”. Sin signo alguno de autocrítica, sólo reivindicaciones prosaicas. Nada sobre su actuación en el caso Cabacas o la vuelta a la jefatura del mando destituido que dio la orden de “actuar”, terminando con la muerte por un pelotazo de goma del hincha del Athletic. Es lamentable la defensa corporativista a ultranza de las actuaciones frecuentemente desproporcionadas de sus miembros, en manifestaciones pacíficas en las que participan mujeres, ancianos y niños que defienden nada menos que los derechos humanos. No han debido visionar bideos en los que se les ve golpeando con saña a la población que dicen defender. No demandan de sus superiores que se les capacite psicológicamente para poder desarrollar con eficacia la defensa de la población y que no sea considerada a controlar a porrazos, eso si, tras pasamontañas. Tampoco se aprecia en la web ningún signo de reflexión sobre la necesidad de racionalizar el gasto desproporcionado que supone el mantenimiento de más de ocho mil agentes: para este sindicato es un factor irrelevante, su objetivo es aumentar la plantilla para cubrir el desproporcionado absentismo por enfermedad, vacaciones o “moscosos”. Convocan paros para que les suban el sueldo, ignorando que ganan casi el 50% más que sus colegas de otras `policías. Reivindican el adelanto de la jubilación argumentando la “peligrosidad de su trabajo”. La Consejera les saca la cara cuando sus huestes se exceden y hay testimonios fotográficos con evidencias inoportunas acusadoras de que la defensa urdida por los mandos queda desmentida. A partir de ahí, los sindicatos se movilizan para montar un sistema defensivo a ultranza de la inocencia de sus afiliados. Si se añade que la consejera ha cometido la torpeza política de reponer en su puesto al responsable del dispositivo causante de la muerte violenta de Cabacas, se comprenderá fácilmente el escaso prestigio de la Ertzantza en amplios círculos críticos de la población.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario