LA TRANSICION FUE UNA IMPROVISACIÓN

LA  TRANSICION FUE UNA IMPROVISACIÓN

Todos los problemas que se han ido acumulando desde que murió Franco a lo largo de la Transición surgieron porque la fórmula “ atado y bien atado” se basaba en la figura de Carrero Blanco como pilar sobre el cual edificar el posfranquismo. Pero al “volar” el Almirante hubo que volver a rediseñar el plan y surgieron imprevistos a causa de ambiciones de los herederos de los que medraron en el Movimiento. Tuvieron que designarle un sustituto  y con la ayuda de Doña Carmen Polo de Franco, se nombró a Don Carlos Arias Navarro, el “Carnicero de Málaga” de recambio. Un  inútil en todos los sentidos, por lo que le hicieron  Marqués de Arias Navarro y se le quitaron de en medio. A Rodríguez de Valcarcel se le ocurrió nombrar a Adolfo Suarez  para desmontar el circo, nada menos que al  jefe del Movimiento. Era apostar por introducir  al zorro  en el gallinero, con los generales con el sable en la mano y  las grandes fortunas llevándose el dinero a  paraísos fiscales en bolsas de basura.  Estaban los hijos de los que se habían aprovechado del  Movimiento que esperaban impacientes el tránsito fluido bajo la protección de “El Ogro” para  encontrar  su apaño. Estraperlistas que se enriquecieron con la miseria de la población, falangistas y oportunistas colocados  en instituciones, ayuntamientos y empresas públicas en pago por los servicios prestados. A toda esta marabunta  repentinamente se le esfumaron sus expectativas. Además, la ciudadanía  temía que los militares dieran un nuevo  golpe de estado y se volviera al 36; los socialistas seguros,  admirando el espectáculo desde  Francia, esperando la postura de Carrillo y el  PCE. Todo fue una comedia de enredo en la que el rey impuesto por Franco y  que juró los Principios del Movimiento fue perjuro renegando de los aquellos principios inmutables,  aceptando  su demolición. Con la aprobación de los neofranquistas  a cambio de promesas secretas que se van descubriendo a lo largo de la agonizante Transición y  que se agarran a los restos del naufragio  exigiendo “qué hay de lo mío”  Cataluña ha dado un golpe y se va,  los vascos en stand by, y todos vigilados por la UE que con Brexit hace agua por todas partes.