martes, 7 de agosto de 2018

LOS MUNICIPALES VASCOS PREFIEREN ARMAS A ARGUMENTOS


LOS  MUNICIPALES VASCOS PREFIEREN  ARMAS A  ARGUMENTOS
En  una entrevista al recién  elegido  presidente de los municipales de Euskadi pone de  manifiesto la   recurrente y obsesiva  voluntad  de los mujicipales de  portar pistola. “Herramienta” le llama a lo que es  capaz de  matar si se dispara contra una persona y en todo caso  para intimidar y no para convencer. Alardea de su   preparación  para el ejercicio de su misión, pues  para ingresar deben superar  pruebas rigurosas  y    un cursillo de seis meses en la academia,  enfatizando el alto grado de preparación que adquieren al terminar su formación. Parece que se refiere a aspectos físicos en los que  se  les potencia  como valor esencial. Pero nada explica sobre la capacidad psicológica y humanística que reciben,   qeriendo dar a entender que es superflua ya que ·”convencen y disuaden” a base  de  su  capacidad física que aprenden para el combate a la que se  añade la “herramienta”,.. No parece que su  uso  sea aceptado en todos los ayuntamientos, pues en aquellos en que los  ediles son capaces de distinguir el  concepto de Orden Público del de  la Seguridad tienen la convicción  de que es preferible potenciar los  valores humanos sobre los físicos o disuasorios de las armas que provocan   el miedo a  la fuerza. El orden público es el factor de sumisión de la ciudadanía  por el temor y el rechazo a esos  policías con  armas y con  facultades físicas disuasorias  muy desarrolladas,  aunque  con escasas facultades   mentales y humanísticas y que  a la hora de  "dialogar" lo hacen con la mano en la “herramienta” que es la que aporta  fluidez a sus “argumentos” Con el  bagaje  de  conocimientos de psicología que obtienen y   la  elemental  titulación exigida, a la que se añade la del curso de la academia,  alardean de estar capacitados para dirimir situaciones complejas entre ciudadanos o las suyas propias con la ciudadanía: lo solucionan con  amenazas y gritos, blandiendo  la porra y en último extremo el argumento inapelable  de la  milagrosa herramienta para convencer a ciudadanos  que carecen de sus facultades  física y  lógicamente sin   pistola, que es lo que quieren que se les permita llevar para  “argumentar con  convicción”.

1 comentario:

IRIS dijo...

No hay mejor arma que la palabra, por lo tanto sobran las demás.
Con la palabra, argumentando y razonando se pueden salvar vidas e incluso evitar guerras lo que una pistola jamás conseguirá.
Las armas te darán la razón a la fuerza pero jamás te darán la fuerza de la razón.
Saludos!!