JUSTICIA PARA LOS DESAPARECIDOS NAVARROS EN 1936
El pleno del
Parlamento de Navarra del jueves 14 de noviembre ha aprobado la proposición de
Ley foral de reconocimiento y reparación moral de los ciudadanos navarros
asesinados a raíz del golpe militar de 1936. Una vez más Nafarroa, origen de la
nación vasca, da un paso decisivo y constituye un ejemplo para los restantes
herrialdes vascos, a pesar de la presión
de los “navarristas”, pues el PP ha sido el único que ha votado en contra. Era
una deuda de la sociedad navarra con sus hijos asesinados y enterrados en las
cunetas y fosas sin identificar. Ahora corresponde al ejecutivo poner en activo
los acuerdos que seguramente van a suponer el descubrimiento de muchos hechos
tenebrosos ocultos intencionadamente por
el régimen de Franco y los sucesores que se han negado a reconocer la dignidad
de aquellos honestos navarros cuyos
familiares y el pueblo en general han tenido que soportar la humillación e
ignorancia a la que les han condenado los vencedores. Ahora se echa de menos
que en el Euskal Lege Biltzarrea no haya
habido aun una iniciativa equivalente para el recordatorio de las víctimas ignoradas
y humilladas que causaron las tropas “nacionales” en su ”avance liberador” que
causaron en Bizkaia, Araba y Gipuzkoa. Quizá se debe a que no hubo
desapariciones en estos territorios? Es que no se quiere crear tensiones que
molesten a los ciudadanos de orden o a los partidos nacionales que aducen que volver con temas de la
guerra es dejà vu, que ahora corresponde mirar hacia adelante? Pues no: los
pueblos que han sufrido levantamientos militares contra la población y contra
los poderes legítimos constituidos no pueden tener paz hasta que no se produzca
una catarsis liberadora. Así sucedió en Argentina después de la “gesta de la
Junta Militar”: tuvo que surgir un Ernesto Sábato, quien fue nombrado
presidente de la CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas),
cuya investigación tuvo como resultado el libro “Nunca Más”, que constituye un
ejemplo de honestidad, de vigor y de justicia. . La conclusión del informe
indica literalmente que ” la Comisión repudia el terrorismo en general, pero su
misión no es investigar los crímenes, sino estrictamente la suerte de los
desaparecidos, llegando a la conclusión de que la desaparición de personas
existió, que no fueron hechos aislados.…” Por eso, y trasladando a lo sucedido
en Nafarroa en la guerra civil, se
necesita que esa catarsis se debe extender a los familiares de los desaparecidos del País Vasco
para que se investigue dónde están los restos de sus deudos a los que se les
debe el reconocimiento que merecen y
hasta que no se les satisfaga esa necesidad elemental no habrá paz en este
país, aunque pasen siglos. Porque sin duda que los verdugos aplicaron el derecho
penal del enemigo y tienen derecho a la reparación..
No hay comentarios:
Publicar un comentario