EL CALVARIO
DE XUA
Xua ha
cumplido hoy tres años, pero paradójicamente no será un día feliz para ella a pesar de que sale de
la cárcel donde nació, pues le separan de su madre presa, a punto de finalizar su condena y por tanto con derecho
a beneficios penitenciarios para que Xua no tenga que sufrir las consecuencias
de hechos de los que no es responsable. Pero las autoridades carcelarias
quieren castigar hasta las heces a su
madre y lo hacen en la persona de su
hija separando a ambas. A cualquiera que
se le expliquen los hechos, sean cuales sean sus convicciones y creencias no puede por menos de
solidarizarse con el dolor intencionado de los carceleros a la niña y al mismo tiempo cuestionarse los
sentimientos y convicciones morales de
los responsables que toman esta decisión
que presupone una absoluta carencia de
humanidad para separar a Xua de su madre. Un sistema penitenciario que proclama
que su objetivo es la reinserción del
preso, cuyos funcionarios tienen atribuciones para tomar este tipo de decisiones, pero con tal falta de sensibilidad, a pesar de ser legal, tienen una grave limitación psicológica que les incapacita para relacionarse con seres
humanos, pues ignoran a sabiendas que las personas que custodian son presos que tienen sentimientos, sufren y aman a sus
hijas, lo que es dudoso que tengan quienes
carecen los que muestran tal falta de humanismo. Seguramente a quienes se
faculta para tomar esas rigurosas decisiones tan inhumanas se les exija no
dejarse arrastrar por sentimentalismos para ocupar cargos que degradan a la institución. Aunque no sea el caso, en los
KZ , donde se gaseaba a judíos,
comunistas y seres inferiores los máximos responsables de los Lager debían poseer las
“condiciones de autocontrol para no sucumbir
a los instintos humanos que degradan a
las razas inferiores”, tal como lo proclamó en un centro de formación secreto un
oficial de las SS que capacitaban a los especialistas para la Endlösung“ explicando sus funciones en los Campos de Exterminio. A tu ama y a ti,
Xua, os queremos y confiamos en que
pronto te reúnas con tus gurasoak y descubras lo maravillosa que es la libertad.
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