MEMORIAS DEL CORONEL NAZI MEISINGER

MEMORIAS DEL CORONEL  NAZI MEISINGER
En sus  memorias este coronel nazi destacado en Varsovia para organizar el gheto, relata que impartió  una conferencia en un círculo de padres de alumnos de un Gimnasium en Berlín que  trató sobre la gran vocación y espíritu de sacrificio que se exigía para ser militar en aquella época gloriosa. Lamentaba  que había que luchar contra la incomprensión de la población,  pues ésta no entendía el gran esfuerzo  que suponía enfrentarse al enemigo en el frente y, además,  soportar los reproches de la población civil que rechazaba  detener e interrogar a sospechosos de intentar derribar las estructuras del III Reich. Alude a  judíos, comunistas, homosexuales, gitanos entre otros. En un régimen militarizado, donde todo el mundo se  vigilaba entre sí, que aquel fanático se quejara de que algunos se opusieran a los crueles  métodos de los servicios policiales, mostraba los síntomas de una sociedad enferma que degeneró  al hacer que el 90% de la población participara de la ideología  nazi y aceptara como naturales  sus métodos.  Cuando  un pueblo, por muy desarrollado  tecnológicamente que sea, renuncia a  sus ideales, se convierte en  rebaño de ovejas y carneros dóciles y obedientes porque los mastines que  vigilan no les pierden de vista, pero ese pueblo está condenado al drama de la  pérdida de su idiosincrasia, socarrarán a las razas inferiores en los KL para convertirlos en estiércol  para abono. El Tercer Reich provocó la Segunda Guerra Mundial, terminando el  pueblo alemán  humillado y  sus infraestructuras arrasadas. Pero la ideología de superioridad racial no la ha abandonado nunca y  sueña  con  repetir la gloria en el Cuarto Reich, ahora sin los lunáticos  generales prusianos, ni Luftwaffe, Pantzer,  Ubots ni Blitzkrieg, pero con armas más mortíferas y destructivas  por los graves efectos que  son asumidos por la población con naturalidad. Ahora Berlin  domina la economía de Europa por medio del BCE, el Euro, el dogal del  déficit y  las  variables económicas básicas de la UE,  con el servilismo de sus gobiernos socios. Esta clase de fanáticos, como el coronel Josef Meisinger de las memorias tiene la característica de que  cuentan sus crueles fantasías para justificar su violencia  porque creían que todo el mundo menos ellos estaban equivocados  y eran enemigos.. Algo parecido a la jueza Lamela: todo el que discrepa de la Constitución que impusieron los herederos del Franco deben responder ante la Audiencia Nacional, considerado en Europa un tribunal especial según los principios generales del derecho y por ello,  las sentencias de los jueces internacionales sacan los colores a la justicia española por lo perverso  de sus sentencias que son revocadas sistemáticamente.

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