EL DON DE PROFECIA DE NUESTROS POLITICOS

EL DON DE PROFECIA DE NUESTROS POLITICOS. Los vascos somos privilegiados en diversas ciencias y artes y la más notoria es la del Gobierno Vasco que posee el don de profecía. Todas sus previsiones y avances económicos que publicó a principios del 22 se han cumplido milimétricamente, quizá apoyándose en la sagacidad de los expertos en prospectiva del Gobierno de España. Quechu Montero, la castiza Ministra de Hacienda ante la inflación desbocada que se precipitó “inesperadamente” en tasa de dos dígitos no se le ocurrió otro argumento justificativo que asegurar que era una situación puntual; que a fines de año se volvería de nuevo al 2% . Efectivamente, de éxito en éxito, ha tenido que implantar medidas de salvación muy parecidas a las de una “economía de guerra”. Los periodistas vascos de la prensa “seria” ya anticipaban que la reciente manifestación en favor de los presos vascos se preveía un soberano fracaso porque los motivos de su convocatoria estaban cumplidos, pues el 85% de los presos que estaban en cárceles españolas ya habían sido trasladados a las vascas, por tanto la convocatoria se vaticinaba que iba a resultar un fiasco. Efectivamente, según datos de la policía municipal se estima que acudieron unas 65.000 personas, la más multitudinaria desde la pandemia de Covid 19. Eso es agudeza y rigor informativo. Las fuerzas vivas ya han reaccionado tratando de rebajar los tozudos datos de su fantasía profética. Un ex rector de la UPV se sincera afirmando que” las condenas se deben cumplir”. Como si trasladarles a cárceles vascas fuera el objetivo de la manifestación. Un conocido asesor de las víctimas demanda que se les aplique la ley como a cualquier otro preso. Hasta ahora ha guardado silencio sepulcral. Y el máximo ejecutivo de un sindicato nacional considera que la política penitenciaria con los presos vascos ha terminado. Lo perverso de estas categóricas afirmaciones es que se desmienten por sí mismas. Conviene reiterar para información de periodistas poco diligentes que el “Goiburu” de SARE es ETXERA, no euskal kartzeletara”