PEDRO SANCHEZ: PROFETA SALVADOR DEL PSOE?

PEDRO SANCHEZ: PROFETA SALVADOR DEL PSOE?.

 Parece que las personas inteligentes cuando se incorporan a la política sufren una mutación mental que les retrotrae a  su infancia y  son incapaces de distinguir lo esencial de lo accesorio. El nuevo Secretario General ha decidido que su objetivo estratégico será PODEMOS, partido en fase de  fundación, que ha logrado unos resultados modestos en la europeas recientes, pero que se le atribuyen expectativas importantes. Tratando de ser didáctico le llama “Populismo”,  con intención despectiva. Se ha creado un delirio que es una mezcla del PP con PODEMOS,  que entre ambos formarán una tenaza para evitar el imparable ascenso del PSOE al poder. Parece que ahora descubre que el “populismo bolivariano” deja de ser una danza  caribeña,  convirtiéndose en una real opción de poder en España. No ha sabido interpretar los mensajes claros que le estaban mandando sus bases para  que renueve toda la estructura anquilosada  que ha sido la que ha llevado al desastre al partido. Se ha rodeado de los barones regionales fracasados que han recibido  correctivos ene las últimas   elecciones. Sánchez ha querido infundir un estilo nuevo con su irrupción en los círculos sociales resaltando su figura, expresándose en varios idiomas  para demoler a los presidentes anteriores que no sabían expresarse más que en su español ordenancista y patriótico.. Quiere mostrar un estilo juvenil e informal como el prototipo del nuevo ciudadano español:  deportista, polilingüe, profesor cercano de universidad, afable. Pero sin  moverse de los dogmas del más celtivérico  estilo español: Para él la unidad de España es innegociable, no caben matices que le hagan perder votos en la Patria profunda.. No oculta que disputará  al PP los votos en el caladero del centro,  claramente conservador y sin ideología. Sabe que el  de izquierda, que fue el suyo  tradicionalmente, lo tiene perdido irremediablemente porque se le han marchado a los nuevos movimientos sociales, no partidos necesariamente,  que han despertado y cuyos lideres naturales  han sabido escuchar el mensaje de rechazo general, creando expectativas que pueden cambiar  el panorama político de España. A esta marea imparable del progresismo es a la que Pedro Sánchez cree que puede oponerse llamando populistas a los que le quieren quitar el disfraz de progre  al partido que desde recientemente lidera. Debería cuidar y estar atento a sus votantes tradicionales, pues  se les están marchando a raudales y sin expectativa de que vuelvan. Con la experiencia acumulada por el PSOE durante sus periodos de gloria, con los casos de corrupción generalizada en sus filas, se torna muy complicado querer recuperar a sus votantes que en su día se sintieron socialistas. Como ironizaba un militante defraudado: este “figurita” va a hacer buenos a Rubalcaba y  Zapatero.