EBOLA: SINCERA
BIENVENIDA A TERESA
No sabes bien el afecto que te tenemos, a pesar de que no te
conocemos personalmente, pero hemos seguido con interés, incluso con dolor la
evolución de tu cruel enfermedad. Además de que el gobierno ha jugado contigo de manera humillante, hemos
sabido de soslayo que te infectaste porque te ofreciste como voluntaria para
atender a los misioneros que venían de Africa contagiados. Que el Consejero de
Sanidad de Madrid te ha llamado mentirosa, como queriendo mostrar que debes ser
bastante idiota, pues no sabes que no podías tocarte la cara después de entrar
en contacto con los enfermos. Quizá ignores que has estado en riesgo de morir
porque te han hospitalizado en un centro que estaba cerrado para ahorrar a
causa de la crisis, por eso te mandaron a casa a pesar de que dijiste en Urgencias
que tenías síntomas de estar con el virus y que la ambulancia en la que te
trasportaron sirvió para hacer otros varios traslados, sin ninguna protección
especial.. Sabemos que el Consejero Rodríguez
se ha disculpado por el insulto y parecía sincero pues estuvo a punto de
echarse a llorar. Estamos seguros que le perdonas, pero cuando alguien le dijo
que debería dimitir por sus errores respondió con soberbia que no le importaba
que le cesaran, pues tenía el porvenir resuelto. O sea que los políticos van a
resolverse su futuro. Curioso, no?.A quien le han despedido de su trabajo es a
tu marido porque podía haberse contagiado de ti. O sea que, además de tu
enfermedad os van a faltar recursos económicos.
La estrella ha sido Ana Mato, la ministra de sanidad. Ha facilitado a los medios continuas explicaciones y ha liderado
los momentos duros de incertidumbre. Las personas excepcionales se descubren ante los problemas. Nos emociona y nos hace sentir
orgullosos la solidaridad de tus compañeros de la
sanidad. Todos han sido Teresa y gracias a su profesionalidad y han mantenido la
tensión en exigir responsabilidades a los jefes, por su presión y solidaridad se puede asegurar que estás viva. Confiemos en
que en la Consejería no decidan despedirte de tu trabajo por haber estado contagiada. De este tipo de
gestores, después de tantos errores y con la política de reducir el gasto para
privatizar la sanidad, se puede esperar cualquier cosa. Ahora te deseamos que
te recuperes totalmente y que sepas que la población te admiramos. Pero procura ganar la oposición
para que te hagan fija, pues es seguro que van a empezar a rodar cabezas y no
vaya a ser que te culpen a ti.