SOLUCIONAR LOS PROBLEMAS IGNORANDOLOS

SOLUCIONAR LOS PROBLEMAS IGNORANDOLOS.

 El Presidente de Ukrania, Yanukovich, que se mostraba intransigente con la población que pedía al gobierno posicionarse hacia la UE y alejarse de la garra de la Rusia de Putin, ante la presión popular ha terminado por ceder, destituyendo al gobierno y al primer ministro. Pero la población ya no acepta nada de este desalmado que ha masacrado sistemáticamente a los manifestantes con salvajes cargas policiales en Kiev, que han causado muertos y una situación prerrevolucionaria. Ahora ya sólo aceptan su dimisión y la convocatoria de nuevas elecciones a lo que “Yanuk” se niega categóricamente, con lo que se ha extendido la indignación popular a todo el país. Su situación se ha convertido en humillante, pues está ofreciendo concesiones que cada vez le degradan más y la población percibe su debilidad. El tiempo de rosas se ha transformado en tiempo de  cerezas. Viene a cuento este preámbulo, porque el Presidente de la Comunidad de Madrid se ha visto obligado a rebajar su chulería habitual porque los tribunales han rechazado su proyecto de privatizar la sanidad de la Comunidad y el consejero que lideraba el proyecto  ha dimitido. Después de la democrática presión de la población, del estamento médico y de una inteligente campaña de prensa contra el proyecto, finalmente tiene que echar marcha atrás y soportar la sensación de ridículo.  Quien se mostraba desafiante con la locura de Eurovegas y con la certeza de lograr para Madrid los JJOO del 2024. Nada ha tenido éxito y se ha visto obligado a tragarse el sapo que él mismo se ha cocinado,  moviendo sus plumas como un pavo real, aunque  siendo investigado por los jueces  a causa del célebre ático de Marbella.

En Catalunya una masa de dos millones ha salido a los caminos y ciudades formando una cadena de cuatrocientos km en apoyo de su reivindicación de una consulta sobre su voluntad de independencia. Debería ser considerado como un aviso para el gobierno de Madrid, pero Rajoy ni está ni se le espera. Nada, ni caso, a ver si se aburren y se dedican a resolver sus graves problemas económicos y se olvidan de romanticismos del año 1714, en el que Catalunya fue invadida por España. Les asegura paternalísta que con España están mejor que yendo a la aventura de la libertad sin rumbo. Aducen los constitucionalistas que si fueran a la independencia los problemas inducidos requerirían un cambio de la Constitución e infinidad de otros más que lo complicarían. No deberían olvidar que cuando Frau Markel impuso a nuestro país la prioridad para atender las deudas externas, el PP y el PSOE, servilmente, o incorporaron el cambio a la Carta Magna sin apenas trámites.. Y no pasó nada, sólo que la población se sintió manipulada porque les engañaron al cambiar algo que siempre se había considerado como eterno.

En España nuestros políticos siempre se han tomado a beneficio de inventario lo  importante: la Transición al morir Franco se trató de hacerla sin molestar a sus herederos e imponiendo que la oposición aceptara  no  pedir responsabilidades a los colaboracionistas de la dictadura. A los Arias Navarro, a Areilza, a Martín Villa, Adolfo Suarez, Fraga Iribarne, Calvo Sotelo…Se solucionó todo con una chapuza en forma de una Amnistía general  que favorecía y olvidaba las fechorías de los neoconversos en “Demócratas de toda la vida”. Pero sí se emprendieron unos planes enloquecidos  de destrucción del tejido  impuestos, por Europa, lo que logró solucionar momentáneamente la presión, con la ayuda de los fondos que nos mandaban desde la UE, que no eran como se pensaba un obsequio del  cielo como el maná,  se debían de dedicar para desmantelar la industria y dedicar todo el país a espacio de ocio y vacaciones para los dueños de Europa. Por haber realizado aquella transición sin pedir responsabilidades a los que paralizaron las mentes de la población durante la dictadura y nos convirtiéramos en el vagón de cola del progreso, los sucesores han provocado el caos de la crisis que ha supuesto seis millones de parados y, lo que es peor, una impunidad insultante de esos políticos ante la corrupción generalizada y ante los delitos, sin que los jueces, convenientemente domesticados, se atrevan a investigar por si tiene consecuencias para su propio status. Las expectativas de solución que están proyectando estos neofranquistas como de Guindos, Montoro, la Báñez,  Mato y el inefable Jorge Fernandez Diaz entre otros ilustres incompetentes, nos aseguran que la salida de la crisis vendrá sólo con un cambio estructural del sistema, con la implantación de la República y con el derecho a autodeterminación a incorporar a la nueva constitución que se requerirá. Estos rufianes siguen la máxima maquiavélica “Toda alabanza al poder es corta. Toda crítica es excesiva”