domingo, 9 de febrero de 2014

FINANCIAL TIMES: "DE GUINDOS EL PEOR MINISTRO DE ECONOMIA DE LA UE"



“FINACIAL TIMES”:  “DE GUINDOS ES EL PEOR MINISTRO DE ECONOMÍA DE LA UE.”
El Financial Times” califica a De Guindos como el peor Ministro de Economía de la UE Señala que ha superado incluso a Elena Salgado en el humillante ranking. Explica el influyente  periódico que para clasificarlos se ha atendido a tres criterios: i) Habilidad política; ii) Rendimiento de las economías de cada país y iii)  Credibilidad frente a los mercados. Está claro que nuestro ministro no da la talla según estos criterios.
Esta opinión la corrobora el comisario de la UE, Olli Rehn, que afirmaba respecto a las medidas aplicadas por De Guindos para solucionar la crisis,  que  “peor no se podía hacer”  Si a estas “flores” se añade que el BCE vaticina que la economía española no volverá a la situación previa a la crisis hasta al menos el año 2030, habrá que ir preparándose para esta travesía del desierto que espera a la desmovilizada y temerosa ciudadanía española si antes no se produce un milagro o la población, harta, no toma conciencia de que la única alternativa es la toma del poder y exige un cambio de sistema económico y demande responsabilidades a los causantes de esta hecatombe. No hay que ser adivino para evaluar su gestión  económica tan caótica y equivocada, pues los datos son tozudos: más de seis millones de parados, emigración al extranjero de la juventud mejor preparada y unas tasas de pobreza que supera las de Grecia, Rumanía o países del Este de Europa. A ello habría que añadir la tolerancia y aceptación de la corrupción por parte del PP y el PSOE de la que han sido  promotores y con la que se han beneficiado para financiarse y para enriquecer a sus cúpulas directivas. Las medidas depresivas adoptadas y la subida enloquecida y sin criterio de impuestos y el trato de favor a los poderosos que este ilustre incompetente ha implantado para luchar contra la crisis y salir de la depresión, han resultado manifiestamente negativas para  volver a la senda del crecimiento. Su irracional optimismo sin fundamento ante los continuos fracasos que está cosechando y que le son reprochados por la Comisión de la UE, es de una falta de responsabilidad y una ignorancia suicida pues no es capaz de discernir las consecuencias de las medidas que está tomando. Además, su actitud arrogante y la permanente huida adelante apoyado por el silencio cómplice de Rajoy y el “rigor y eficacia” de Montoro hacen suponer que el final de la crisis  nos va a exigir  todavía pasar por los “misterios dolorosos” Cuesta creer que es economista….

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