HOMILIAS DE GUERRA PARA LA PAZ
Rouco Varela quiere morir matando. Vaya espectáculo grotesco
que presenta a una sociedad democrática en el siglo XXI. En el funeral de
estado por un expresidente, en la homilía insinúa que una nueva guerra civil es
posible, permitiéndose expresar un juicio con contenido político, mostrando
nostalgia por el Nacional Catolicismo que nos trajo la Cruzada de Franco, logrando
derrotar a los poderes del Averno. Este inquisidor ha ido el Presidente de la
Conferencia Episcopal Española, lo que
significa que marcaba la linea de pensamiento y que ningún obispo tuvo el
coraje de protestar por su postura antievangélica, siendo toda la Conferencia
corresponsable del abandono masivo de la Iglesia por parte de los fieles ya que
éstos ignoran críticamente lo que ordenan sus obospos. Si bien ante las
autoridades políticas sigue existiendo una intromisión mutua de la que se
aprovechan tanto la jerarquía como el Gobierno al utilizar la capacidad
manipuladora de la iglesia sobre los creyentes. No conviene, sin embargo,
frivolizar con estos temas, pues su historia bélicista le acredita en esas artes y coincide con la
recurrente ley económica que exige cada cincuenta años una guerra destructiva general para la
supervivencia del sistema capitalista. Al margen de criterios filosóficos que
puedan argumentar los creyentes respecto a los efectos catastróficos que han
llevado al Pueblo de Dios a verse obligados en conciencia a abandonar a esta
especie de Anticristo, los jueces deberían analizar si el contenido de la
homilía por si constituyera apología por incitación a la guerra civil,
puesto que proclama que la situación política, económica y social actual de
España lleva a un nuevo conflicto bélico. Parece que ignora las consecuencias
de la insurrección del ejército rebelde dirigido por generales facciosos, bajo
el mando del Generalísimo, con el inestimable apoyo de la Iglesia Católica, y
que 75 años después el pueblo sigue sangrando a causa de las delirantes
manifestaciones de Rouco, que, para despedirse de su grey apela a la vuelta a la
lucha fratricida en lugar del perdón y de
la reconciliación. Cual será su libro de cabecera: Los Evangelios o
“Mein Kampf”?
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