viernes, 6 de octubre de 2017

"MANDARRA" HA ENCONTRADO TRABAJO



 “MANDARRA” HA ENCONTRADO  TRABAJO
No todas las noticias tienen que ser malas para que causen sensación: también se goza cuando un buen  amigo dice que ha  encontrado  un trabajo y si es fijo, pues aun mejor. Si, uno  termina por perder la  sensibilidad a base de recibir noticias de empresas que cierran y sus trabajadores van a la calle, sobre todo, como es el caso de “Mandarra”, pues tiene una  edad crítica y puede  ser discriminado negativamente para otros trabajos porque hay  candidatos más jóvenes y teóricamente mejor preparados. La elección en esos casos no tiene duda cuando el empresario busca la solución fácil: siempre se elige al más joven; el de mayor  edad  queda una y otra vez relegado a la espera del   milagro que no llega  o que   un empresario reflexivo sea capaz de entender la importancia de contratar  un trabajador con experiencia contrastada y sepa valorar actitudes que sólo se descubren cuando realmente se selecciona en función de capacidades objetivas contrastadas, como la  seriedad, capacidad e idoneidad para el puesto, el interés en integrarse oel sentido de  la lealtad. En esa elección sin prejuicios ni afán de aprovecharse de la legislación permisiva  hace que el demandante de empleo confíe en que el empresario sepa discernir en  un mercado  de trabajo degradado en el que se  imponen  condiciones laborales humillantes porque  se está jugando con ventaja en todos los aspectos. En el caso de “Mandarra” el empresario que le ha contratado ha acertado, pues ha sabido deducir de las  conversaciones  que ambos han mantenido, que su edad no supone  una limitación, sino una ventaja, pues  posee facultades físicas excepcionales, ya que  es un gran montañero, además   ha dirigido con éxito  colectivos de composición muy diversa y eso es fruto de la experiencia. Tiene capacidad de iniciativa que es lo que necesita el empresario  con criterio. Resalta su  inquietud por ampliar sus conocimientos en todas las materias. Tiene predisposición  a colaborar en todo momento y circunstancia, unas veces para formar a quienes se les encomienden funciones que desconocen  o  a   trabajar sin horario para sacar adelante algún  trabajo que se haya complicado. Uno se siente feliz al  ver que “Mandarra” ha tenido la oportunidad de que se le trate con la justicia que merece por su actitud y conocimientos profesionales. Le han llamado de la empresa   para comunicarle que es el elegido y le harán  un contrato de carácter de fijo. 
¿No es lógico acompañar a un buen amigo en sus   éxitos ?


6 comentarios:

IRIS dijo...

Un empresario inteligente y que mira por su empresa al seleccionar al mejor e idóneo aspirante al puesto ofertado. Mi felicitación a Mandarra, por sus cualidades laborales que supongo serán igual o superadas por las personales.
Saludos!!

egaz dijo...

Verdad que sí, Iris? Se puede decir que ese empresario es inteligente y ecuánime, pues es una tentación casi inevitable que se aprovechen de las facilidades abusivas que pone a su disposición el gobierno para que los cínicos exploten a los trabajadores porque no tienen otro remedio que aceptar las condiciones que se les impongan, pues la alternativa es la calle y la pérdida de la autoestima. Espero que Mandarra te lea el comentario. Es el que me dijo que le encanta leer tus puntos de vista por lo acertados y serios que sueles hacer. Ya te explicaré. Como te harás idea, está como loco con el nuevo trabajo. Gracias en su nombre, Iris.

Unknown dijo...

Mucho me temo, Iris, que Mandarra se va a encontrar con algún gerente “bandarra” (con la acepción de la RAE de: 1. m. y f. coloq. Sinvergüenza, frescales) que no reconozca la valía del susodicho y que le ofrezca una categoría ínfima para su experiencia personal y laboral, y por consiguiente acompañada por un sueldo mileurista o rozando el mileurismo… y seguramente con la venia del o de los socios dueños de la empresa… luego sus expectativas personales volverán a ser pisoteadas sin miramiento alguno. Las felicitaciones deberían ir para estos directivos-gerentes-empresarios, si algún día logran dejar de ser tan bandarras. Reto arduo y difícil hoy en día.

Unknown dijo...

¿Qué habrá sido de “mandarra”, ahora que llevará sobre un año contratado?
¡Estará contento por tener trabajo! ¡Lo cual es muy importante hoy en día! Como no debe ser de otra manera.
Seguramente estará bien afianzado en su empleo, con unas buenas relaciones entre compañeros y empresa, como no debe ser de otra manera.
Y seguro que también se sentirá bien valorado y con gran proyección en su trabajo, como no debe ser de otra manera.

Saludos, Javier.

Unknown dijo...

¡Gran decepción, Iris, Jabyer!. ¡“Mandarra” no ha superado el periodo de prueba después de casi un año!
¡Resulta que el contrato fijo no era tal! ¡Sino un contrato de “ayuda al emprendedor”!
Es decir, la nueva modalidad de espada de Damocles hacia los trabajadores, donde pueden estar durante todo un año continuamente expuestos a pedírseles cualquier tarea, fuera de sus competencias o bien fuera de sus horarios laborales, etc.
Parece ser que “Mandarra” aparte de labores propias de almacenero, lo que quería este empresario de él era también: un “mozo de recoge-y-tira-basuras” de toda la empresa, de recados, peón de obra, guardia de tráfico, alarma puertas, riega plantas, lavacoches, engrasa máquinas, etc. Y evidentemente, sin valoración ni reconocimiento alguno por esas competencias añadidas El sueldo es el mínimo según convenio, pero eso sí, sin “exigir nada”.
Y la capacidad de iniciativa desde el primer momento se intenta aplastar con la frase: Tú lo que debes estar es ¡Sentado, callado, y esperando que te llamen por teléfono! ¿¿¿???
Bueno, pues con esta modalidad de contrato, este empresario se ha ahorrado la miseria-usura de abonar un finiquito por el tiempo trabajado, y eso que cada vez están más baratos a la hora de despedir a un-a trabajador-a. También se ahorra en preavisar con antelación alguna al trabajador-a. Con la aquiescencia de jueces, asesorías, políticos, sindicatos de trabajadores-as, y buena parte de la sociedad.
¿Quién es el verdadero “Mandarra”, Jabyer?
Saludos, Iris.

Unknown dijo...

Dale recuerdos a ese empresario amigo tuyo, Jabyer. ¡Y felicitale por haber vendido la empresa!
Esperemos que no haya "hipotecado- vendido" también a los pocos trabajadores que aún quedaban en la misma!
Que le aproveche una y mil veces mil todas las ganancias acumuladas durante 23 años de usura!
Que te invite a comer, merendar y cenar varias veces con todo el reparto equitativo (sueldos dignos) que se ha ahorrado durante años.

Recuerdos de Mandarra, a Mandarra al cuadrado!