VENGANZA DEL PSV POR LOS TERCIOS DE FLANDES
La noticia de la humillante actuación de los hinchas del PSV
con un grupo de mendigas en Madrid tiene mayor trascendencia de lo que se le ha
prestado en los medios de difusión y debería ser motivo para reflexionar y sacar conclusiones más allá de
darle un tono entre grotesco y vengativo de los medios contra los ejemplares y
civilizados holandeses. En este episodio están concernidas principalmente unas
jóvenes mendigas que carecen de autoestima porque la sociedad las ha ignorado y
se humillan hasta donde sea para supervivir. Es un colectivo con el que no
cuenta el sistema porque tiene escaso impacto en la sociedad opulenta a la que
nos han hecho creer que tenemos derecho, pero que quienes están excluidos, deben asumir que su medio de vida es la
mendicidad, con las correspondientes consecuencias.. Los hinchas del PSV
protagonistas, seguramente en Holanda serán ciudadanos que cumplen con las leyes de un estado
desarrollado, pero es un colectivo sin estímulos más allá que ir a desfogarse
viendo el partido de su amado PSV. Después, emborracharse conscientemente, para
el lunes estar dispuestos a ir a su trabajo y formar parte del eslabón de la
cadena que constituye una sociedad
perfecta, pero sin ideales ni expectativas. Esta morralla acompaña a su club
cuando juega en el extranjero y es donde liberan sus instintos porque en su país no se lo
permitirían. En los países subdesarrollados culturalmente tienen barra libre y
una de sus especialidades es la ofensa al que consideran marginal. Las víctimas
en este caso han sido unas jóvenes sin
capacidad para ser autónomas con dignidad y se las ingenian para lograr unos euros, aunque
sea a costa de arrastrarse ante esos energúmenos. La policía es el otro eslabón
culpable, pues en las tomas se les ve
junto a los hinchas y chicas echándoles calderilla para que las chicas se las disputen..
Los policías observan con curiosidad el
circo, como si fueran meros espectadores, que no va con ellos. No tenían
órdenes al respecto y la condición esencial para lograr pertenecer al cuerpo es
no pensar, sólo repartir estopa , El único que actúa con dignidad es un
viandante que se enfrenta a los fanáticos
del PSV en defensa de las mendigas, se enfrenta a los cámaras que filman el vergonzoso espectáculo y acaba dándoles
limosna de su propio bolsillo a las chicas, pidéndoles que
abandonen el lugar. Pero detrás de todo este drama que convierte la actuación
de los policías y los borrachos en una comedia, están las
autoridades que no han sido capaces de dar una salida digna a esas jóvenes
marginadas porque no tiene interés para
incorporarlas al sistema. Además, temen crear un conflicto internacional si
ordena a los policías que actúen en defensa de personas que no se pueden valer
por sí mismas. Los políticos habrán analizado el asunto concluyendo que después del espectáculo que
ofrece la democrática España ante el mundo es más eficaz instruir a los medios para que rebajen la tensión y que
el asunto se convierta en una anécdota más de la muchas que se generan en las
sociedades avanzadas que tienen asumido que la existencia de una proporción
limitada de mendigos aporta un tono castizo folclórico y sirve para divertir a
los aficionados al fútbol que son los que potencian el crecimiento del PIB del
que tanto alardean nuestros políticos y que nos hace sentir a la ciudadanía que
ya somos europeos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario