EL SUELDO DE MAGDALENA ALVAREZ
La jueza Alaya ha impuesto
a Magdalena Alvarez una fianza de29,5 millones de euros para responder
de la imputaciones que se le hacen por el caso de los ERE. Al margen de la
consideración de que todo el mundo es inocente hasta que no se demuestre lo
contrario, lo cierto es que algún indicio se habrá descubierto para adoptar
esas medidas cautelares. Se afirma que si no paga la fianza se le embargarán
sus bienes y derechos. Entre éstos sorprende su sueldo de 24.000 € que recibe
como vicepresidenta del BEI, o sea, 4 millones de las antiguas pesetas al mes:
entre 48 y 56 millones al año, en función del número de pagas. Cabe preguntarse
quién es esta lumbrera para pagarle más de 300.000 €. al año. Y se dice que los
políticos están mal retribuidos y que esa es la causa de que se corrompan. Ahora
se entiende que sean tan reacios a los cambios. Con esas retribuciones, quien
querría que cambiaran las cosas?
En declaraciones a la prensa afirma que no piensa en
dimitir. Seguramente doña Magdalena ignora que la mayoría de los ciudadanos no
gana al año lo que ella en un mes. Bendita ignorancia que permite a estos
privilegiados vivir sin remordimientos en épocas de crisis como la que estamos
padeciendo. Vaya por delante la admiración por el coraje y valentía que está
mostrando esta jueza que está siendo tan injustamente desacreditada por la
vergonzosa campaña de los dirigentes del PSOE y
de otros que temen ser imputados
por la corrupción. Por eso convendría que los socialistas se mostraran menos
agresivos al acusar a otros partidos, pues su pasada historia en el poder no es
precisamente ejemplar y si, como aseguran sus dirigentes, quieren denunciar la
corrupción del PP, que empiecen por Magdalena Alvarez o José Antonio Griñán, quien
se salvó de ser imputado al dimitir de Presidente, pero al que se le buscó una
“salida” al nombrarle Senador y eludir la imputación de la jueza Alaya. No
obstante, aunque fueran declarados culpables, la experiencia muestra que los
votantes les confirman en sus cargos, tal como ha sucedido con Camps, Fabra, Sonia
Castedo y otros imputados. Quizá por la extraña solidaridad de los españoles
con los “perdedores”. Por qué el PSOE no ha separado ya a Magdalena Alvarez
ante indicios que políticamente les desacreditan para cualquier cargo?
Preguntaban a Indalecio Prieto la razón por la pasión por el poder? Respondía
con su rústica sinceridad: “Más que el “hoder”, cuando se es joven”. Bill
Clinton así lo proclamaba: Es la
economía, ¡Estúpido!
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