“LOS EMIGRANTES ABUSAN DE LAS AYUDAS SOCIALES”.
Es el miserable slogan difundido por Maroto, ex alcalde de Gasteiz,
para pescar en las sentinas de votos aumentando en casi 10.000. Más allá de la
imagen oportunista y rastrera de la que se vale para su propósito, se evidencia
que en algunos estratos, los vascos somos racistas y debería hacernos
reflexionar, porque PECAMOS bastante de narcisos y nos creemos ejemplares. A pesar de su avance en votos, se evitó que Maroto repitiera de alcalde, pero conviene recordar
que fue el PP el partido más votado con
diferencia. Aunque ante ese riesgo, los restantes partidos lograron in extremis
un acuerdo meritorio y se desbancó al
azote de los emigrantes y sus xenófobos votantes. . Existe entre los vascos de escasa
formación una mentalidad racista que se pone de manifiesto en conversaciones
restringidas, que no se expresan en público
por pudor y para evitar reproches vergonzantes. Estudios sociológicos
demuestran que el nivel de xenofobia entre los vascos va en razón inversa al cultural que poseen, de manera que los menos
cultos son más intolerantes con aquellos que se ven obligados a salir de sus entornos
en busca de una vida digna. Pero es que, además, esa fobia no es fundada, pues las ayudas que otorgan las
instituciones públicas vascas son aprobadas por el Parlamento Vasco y
controladas rigurosamente por Lanbide.
El conjunto de ayudas demuestra que la población vasca si somos solidarios y un referente para otras sociedades. Ese
rechazo hacia los emigrantes de ayudas a
los necesitados y la mentalidad xenófoba
de gente manipulada que acusan a las instituciones de favorecer a los
emigrantes y son rebajadas a los necesitados nacionales. Esta ha sido la
campaña incitadora de Maroto que ha cuajado con tanta fuerza entre la gente que
recibe información a través de programas
basura de la televisión que culpabiliza a los emigrantes de la crisis. Es
preciso divulgar que el saldo financiero entre las cotizaciones que pagan y los
servicios que reciben los emigrantes es muy favorable a Lanbide, pues son jóvenes y con buena salud, por tanto no requieren
de lo servicios médicos y por ello la
jubilación está muy lejana para la
mayoría. Que gracias a ellos se pueden pagar las pensiones y se rejuvenece la edad media de la población.
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