HAZAÑAS DE LAS TROPAS
BRITÁNICAS E ISRAELITAS Y GUARDIA CIVIL.
Las fuerzas militares y policiales de todos los países
siempre tienen sorpresas para sus
ciudadanías. Los más progresistas proponen eliminar de raíz los ejércitos por
inoperantes y por consumidores de
recursos a costa de los dedicados a los servicios sociales. En cuanto a las
fuerzas policiales se inclinan por crear cuerpos sin armas, altamente
capacitados en sicología y expertas en solucionar
emergencias. En un programa de la BBC se hacía una entrevista a un militar que
confesaba que formó parte de un task force de cincuenta soldados cuya misión
era asesinar a militantes y
simpatizantes católicos del Ulster. Expresaba que habían realizado infinidad de
operaciones de castigo y que obedecían órdenes de sus mandos ingleses. En un
programa de televisión se muestran videos en los que se afirman que el ejército hebreo detuvo en los
últimos años a más de ocho mil niños de entre ocho y quince años a los que se
les acusaba de tirar piedras contra los vehículos militares. Se ven las palizas que dan riéndose los
soldados a los niños, cómo los detienen
y cómo imploran llorando la presencia de sus padres. Los soldados mostraban una actitud violenta como si se
tratara de miembros palestinos adultos. Por fin, en una cadena de TV española
se citaba la noticia de que los miembros de la Guardia Civil de Tráfico reciben
complementos de sueldo mensuales en función de las denuncias, de manera que
perciben mejores salarios los que impongan mayor número de multas por
infracciones de tráfico. Por el contrario, el que tiene que atender misiones de
rescate o ayuda en accidentes no recibe complemento alguno. Decía un guardia
civil anónimo que hacía esta denuncia que se evidenciaba el afán recaudador del
Cuerpo y que suponía pervertir los objetivos, pues desataba la pasión por las
multas a los agentes y tendían a inhibirse de las funciones de ayuda y
salvamento porque no recibían por este concepto ningún estímulo adicional.
Estos tres botones de muestra explican que los servicios de seguridad
constituyen espacios opacos intocables denunciados por los organismos europeos
y mundiales de protección de los derechos humanos, pero como los ingleses y los
israelitas son maquiavélicos, ya se cubren al publicar las burradas cometidas
por sus tropas cuyas responsabilidades han prescrito,. de esta manera quedan diluidas en unos
espacios etéreos sin que haya responsabilidades. No así las denuncias de organismos de derechos
humanos sobre los excesos de las fuerzas policiales españolas. Dice un adagio “Los
políticos aducen el desconocimiento como atenuante, cuando realmente es un
agravante”
No hay comentarios:
Publicar un comentario