El Gobierno Vasco probablemente ha descubierto demasiado tarde que la población envejece y todas las medidas que ha implantado o están en curso para incentivar a las familias a tener hijo ya no sean la solución.. Ello demuestra la carencia desde hace muchos años de criterios más imaginativos y eficaces para solucionarlos más allá de aportar fondos sin límites como ha emprendido desde hace poco tiempo. La población no envejece súbitamente, su proceso era y es el previsible permanentemente, pero nuestros políticos piensan que las prioridades son el desarrollo a ultranza, las infraestructuras y el crecimiento sin límite. Que deberá ser la propia ciudadanía la que se las ingeniará para asegurar la supervivencia de la estirpe y así lo ha hecho, pues se ha limitado a reducir el número de hijos y que serán las instituciones públicas las que arreen, como si confiaran en la capacidad e ingenio de los políticos. El final es el lógico: no hay reposición aunque el GV alardea de que la población vasca es la segunda más longeva del mundo. Y con esa mentalidad triunfalista y simplista y las medidas implantadas se muestra satisfecho de su ingenio. Sólo que está aun pendiente de entender que con fondos exclusivamente no va a solucionar la crisis poblacional y va a tener que acudir a otros países subdesarrollados con exceso de población a contratar emigrantes para salvar la ignorancia y soberbia de nuestros políticos y no haber acudido en lugar y tiempo correctos a los demógrafos que son los que pueden ofrecer aun una esperanza remota de solución. Gobernar es complicado cuando no se rectifican errores antiguos que se van acumulando y que terminan por formar parte de la idiosincrasia de un país. En Euskalerría la población de más de 65 años va a ser en breve más numerosa que los niños de menos de 5 años y ese sólo es el principio de lo que viene a continuación. En cambio, cada vez tenemos más perros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario