SARAMAGO: “LAS PALABRAS NO SON INOCENTES…”
En el reciente festival de exaltación guerrera por la celebración en Madrid de la Cumbre de la OTAN ,causa pudor la retórica militar para controlar sus excesos verbales respecto a la euforia en la guerra contra Rusia, son muy oportunas estas reflexiones de Saramago en su obra: “Al borde del Caos” empezando por la evolución del lenguaje que se ha convertido en poderoso arma que va penetrando de soslayo en la jerga popular. Se pasó del Ministerio de la "Guerra" con sentido de fuerza y heroismo militar para dominar a los civiles, a denominarle “ Defensa", que expresa una visión humanística y pacifista que se inicia cuando la ciudadanía rechaza la prepotencia de lo militar porque consideran que sólo son parásitos consumidores de rentas detraídas de otros destinos sociales, como sanidad, enseñanza o pensiones. No es sólo un simple cambio de nomenclatura, es que el universo militar se ve acosado ante una opinión pública cada vez más formada y crítica, por eso se ocultan en sus cuarteles y ocupan otros países en misiones “en defensa de la paz, pero con armas de guerra para darles lecciones de democracia” La historia de fracasos les lleva a sus juegos de guerra ,desprestigiados ante una ciudadanía culturizada, aunque admirados por la plebe. La retórica evoluciona y surge el nuevo concepto de ” Seguridad” con fundamentos filosóficos de virtudcCardinal que pretenden que trascienda a las armas y a la fuerza., Pero los ejércitos son el fundamento del imperialismo y hay que financiarlos frente al creciente antimilitarismo. En la Cumbre de la OTAN de Madrid y tras el barroquismo de ilustres patriotas del despilfarro, acuerdan elevar la aportación mínima de cada miembro al 2% del PIB. En España supondrá duplicarlo. La retórica para apoyar esa locura raya en lo grotesco que ofende a la ciudadanía, pues ya soporta una grave crisis económica y social a la que hay que añadir a los gastos de la guerra de Ukrania. No a la OTAN. Gerrarik ez!!
J
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