ALMACEN DE TRASTOS INUTILES

 

  ALMACEN DE TRASTOS INUTILES.

Si se tiene  una visión retrospectiva de los personajes de la Transición,  se produce la    sensación de melancolía mezclada con decepción e incluso  de fracaso colectivo, con   pocos  motivo para sentirse orgullosos según  la evolución  de los cambios  experimentados  por este imperio   y sus políticos gañanes  que nos han  marcado el rumbo. Que cada uno tenga sus iconos de  los que  se sienta  orgulloso y la melancolía se la atribuyan a los fracasados que no se resignan a ser arrinconados como lo que son y fueron,   ambiciosos,  ya sin causa. Algunos ejemplares son cómicos  por su ineptitud: Pablo Casado, que logró el título  sin estudiar ni exámenes;  Albert Rivera,  quien aspiraba a presidente del gobierno y terminó de recadista de un despacho de abogados  y después despedido por inepto. . El “socialista” Felipe Gonzalez, fundador del GAL  que “valientemente” lo niega. La gloria del transformismo con aureola de héroe de Adolfo Suarez,  que  se  acostó  una noche  Secretario General del Movimiento y a la mañana siguiente milagrosamente despertó demócrata de toda la vida.  Alfonso Guerra,  clown oficial  del PSOE que envestía  contra quienes  pensaban por su cuenta,  cedía su despacho oficial a “miemmano Pedro” predicando  la solidaridad y asistía  a La Maestranza a los toros en  Mirage.  José Luis Corcuera,  ilustre Ministro del Interior que abría las puertas a patadas. El intelectual  Jose Aznar, ideólogo de la derecha española que alternaba con Bush, en el rancho de Texas.. Su consorte ,  la alcaldesa de Madrid, la políglota  Botella, que  popularizó  el slogan: “relaxing cup of café con leche…”  Susana Diaz, que tuvo el coraje de rivalizar con Sanchez para la secretaría del PSOE, lo que resultó su suicido político. Jorge Fernandez Diaz, el devoto  ministro del Interior que condecoró a la Virgen, creó la Policía Patriótica,  pendiente de múltiples  juicios  que le van a llevar a prisión  por  defender el estado. Además, en el basurero han quedado Rodriguez Ibarra, Mayor Oreja, Lola Cospedal, Barrionuevo, Rato y sus aventuras financieras  y carcelarias. La  joya de la corona es el regenerador del PP,  Nuñez Feijoo y  la esperanza del del imperio en el que ya no se pone el sol porque lo están  tomando desde hace cinco años  los jueces  del CGPJ.

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