NOTICIAS DECEPCIONANTES DE LA IGLESIA CATOLICA

NOTICIAS DECEPCIONANTES DE LA IGLESIA CATOLICA.

Los fieles católicos que se habían hecho ilusiones con las palabras y gestos esperanzadores y novedosos del Papa Francisco, tienen que sentirse decepcionados por las noticia de prensa en la que su máxima jerarquía diocesana  aparece mostrando realidades que desmienten las esperanzas de que la iglesia está tomando un nuevo rumbo, abandonando la tradicional  colaboración con los poderosos, ignorando la doctrina del evangelio. Al obispo de Bilbao, Mario Iceta, el Banco de España le ha sancionado con 30.000 €, por su deficiente gestión como   Consejero de Caja Sur, junto con otros 38, la mayoría de ellos sacerdotes, por cuatro faltas muy graves y una grave y  que   ha sido confirmada por la Audiencia Nacional,. En total 2,4 millones de €. La casuística es  compleja y no es del caso detallarla, aunque importa que la sanción es firme por sentencia de la Audiencia Nacional.. Actuaciones como la reseñada no prestigia precisamente a la jerarquía y constituye una muestra más de que no es lo mismo hablar que dar trigo. Una institución, que según la doctrina de su fundador, su misión es proclamar y defender la justicia, ser profética denunciando  los abusos de poseedores de la riqueza y defendiendo a los pobres, que se vea mezclada en asuntos turbios relacionados con el dinero, influencias y con los poderosos que son los culpables de la pobreza de los débiles, constituye un testimonio negativo para los que profesan la fe en Jesús. La jerarquía no ha dado explicación alguna que ilumine la confusión creada ni se ha prestado a pedir perdón por lo que pueda tener de  escandaloso. Sería deseable que se informara a los feligreses del asunto y que la multa fuera pagada por el declarado culpable y no se cargara a las finanzas de la diócesis cuyos fondos están dedicados a fines sociales y caritativos, pues de otro modo los fieles que contribuyen con sus aportaciones a la misión de ‘promover la justicia se sentirían defraudados y la débil credibilidad actual de la Iglesia estaría aun más cuestionada. Nada mejor que proclamar la verdad para responder a una inquietud de la gente de buena fe. Así lo proclama un dicho oriental:“La gente que dice que el dinero no es todo es la que tiene todo el dinero”